lunes, 29 de octubre de 2007

El Gran Error

El pasado lunes 22 de octubre la subsecretaría del interior anunció que decretará por oficio una amnistía inmigratoria general para todos los inmigrantes ilegales que hay en Chile, ellos (el gobierno) suponen que son unos 20 mil los que se hayan ilegalmente en el país, de los cuales 15 mil son peruanos; pero esta estimación es sólo eso, una estimación, yo apostaría a que el número podría llegar fácilmente al doble.

Sin consultársele a nadie, se están otorgando beneficios con el dinero de todos los chilenos (una vez legalizados, los nuevos inmigrantes tienen derecho a todos los beneficios de salud y vivienda que tiene un chileno común y corriente) a quienes han permanecido ilegales en Chile hasta ahora, alterando con ello el espíritu de la ley de extranjería e inmigración y perjudicando a aquellos que están más necesitados.

Erróneamente se nos dice que esto no tendrá efecto sobre la inmigración futura, lo mismo se nos dijo hace nueve años atrás; la verdad es que las amnistías generales generan incentivos poderosos para que se trate llegar a toda costa a nuestro país, subsistiendo de alguna forma o de otra hasta que se produzca el nuevo perdonazo.

La realidad norteamericana lo demuestra, según un estudio producido por el National Bureau of Economic Research (George J. Borjas y Lawrence F. Katz, The Evolution of the Mexican-Born Workforce in the United States, Abril de 2005) producto de la inmigración mexicana ilegal entre los años 1980 y 2000 aquellos sin educación secundaria completa, los que se encuentran al fondo de la escala económica estadounidense, vieron sus ingresos disminuidos en términos reales más de un 4%, lo cual implica una diferencia de un 8% total respecto a la situación que tendrían si es que no hubiese existido este flujo inmigratorio, es decir, los ingresos de los menos calificados habrían aumentado en vez de disminuir durante la década pasada de no ser por la inmigración.



Paralelamente, y gracias a un estudio del Center for Immigration Studies (Steven A. Camarota, Dropping Out: Immigrant Entry and Native Exit From the Labor Market,2000-2005, Marzo de 2006). Podemos ver que uno de los efectos de esta caída en los ingresos para los nativos (los no-inmigrantes) producto del flujo migratorio es la correspondiente caída en la participación dentro del mercado laboral. Los inmigrantes no sólo han bajado los sueldos de los norteamericanos nativos más vulnerables, sino que los han bajado tanto que éstos ya tienen pocos incentivos para continuar trabajando en la misma proporción.



En momentos en que la presidente habla de crear un nuevo pacto social no puede sino extrañarnos que se tome una medida que a la larga atentará principalmente contra los más desposeídos, los que menos se pueden defender. La regularización de la inmigración ilegal sólo traerá más inmigración, lo que aumentará la brecha de desigualdad en nuestro país, y terminará por destruir finalmente el capital social de nuestra comunidad, y eso, a la larga, lo terminaremos pagando todos a través de una mayor carga tributaria.



(Gran Disclaimer: Los gráficos y las referencias a los artículos mencionados en este post se pueden encontrar mucho mejor expuestos en este artículo de Martin Wolf para el Financial Times)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mas errores cometidos en estos dos últimos gobiernos (para que ir mas a tras). Suma y sigue EFE, CONICYT hasta cuando, me pregunto yo?